Un corazón compasivo

Lectura bíblica: Marcos 6:30-44
Tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor. Marcos 6:34
Para el segundo día del campamento de fútbol, ya estás cansado de que te estén siguiendo. Un chico menor que tú cree que eres un profesional de fútbol.
—¡Eres mi héroe! —exclama.
Quiere tu autógrafo. Y quiere que le enseñes todas las jugadas que conoces.
Un día estás cruzando la cancha de fútbol yendo a la práctica y ves a tu pequeño admirador. Está colgado de uno de los postes del arco, suspendido por sus shorts de fútbol.
—¡Qué suerte que pasaste por aquí! —vocifera.
Tú estudias la situación. No es como si estuviera colgando sobre un precipicio. Tarde o temprano se le romperán los shorts y estará bien. Así que te vas y allí lo dejas.
Pero después te pones a pensar. No hiciste justamente lo que Jesús hubiera hecho.
En más de una ocasión, un gentío del cual no se podía librar seguía a Jesús y no lo dejaba tranquilo. En Marcos 6, la gente seguía a Jesús y sus discípulos por la orilla del lago, esperando que encallaran su barca. Jesús no se mostró impaciente. Fue compasivo, juntó a todos y se puso a enseñarles. Al avanzar la tarde, los discípulos opinaron que la gente debería irse y buscar su propia cena. Pero Jesús había notado que tenían hambre. Alimentó al gentío usando una pequeña merienda, fue un milagro.
Jesús hizo tres cosas llenas de amor en esta ocasión: (1) les dedicó tiempo a sus discípulos cansa- dos, (2) les dio enseñanza a las gentes cuando necesitaban ayuda para comprender el amor de Dios y (3) les dio ayuda física a miles cuando tenían hambre.
Ser cristiano significa ir desarrollándonos para parecernos más a Jesús de modo que tengamos un corazón compasivo como el de él. Significa sentir el dolor que sienten los demás de manera que deseemos ayudarles. Para ser como Jesús, podemos hacernos estas tres preguntas y luego poner en práctica nuestras respuestas:
Primera pregunta: ¿De qué manera puedo dar mi tiempo para ayudar a otras personas?
Segunda pregunta: ¿De qué manera puedo dar información acerca de Jesús a quienes necesitan conocerle?
Tercera pregunta: ¿De qué manera puedo brindar ayuda práctica a la gente que necesita algo?
¿Notas alguna vez a personas tristes o afligidas? Cuando las notas, tú también te sientes triste y afligido, ¿no es cierto? Pues bien, esa es la compasión de Jesús que estás mostrando.
No dejes que desaparezca ese sentimiento. Imita a tu Salvador compasivo. ¡Demuestra que te importa cómo se sienten los demás!
PARA DIALOGAR: ¿Cómo piensas llevar a la práctica la compasión que Dios pone dentro de ti?
PARA ORAR: Señor, abre nuestros ojos para ver el mundo que nos rodea. Ayúdanos a ver las oportunidades para dar como Jesús dio.
PARA HACER: Contesta una de las tres preguntas sugeridas y busca hoy un momento cuando puedas dar de esta manera.