Lectura bíblica: 1 Samuel 18:1-4
Aconteció que cuando David terminó de hablar con Saúl, el alma de Jonatán se quedó ligada a la de David, y Jonatán le amó como a sí mismo. 1 Samuel 18:1
Si alguna vez te ha lastimado un amigo, quizá todavía te estés preguntando: ¿Es realmente posible tener un amigo íntimo? La mejor manera de averiguarlo es ver en la Biblia a dos amigos totalmente comprometidos el uno con el otro: David y Jonatán. El relato de su amistad se encuentra en 1 Samuel 18—20. Si lees los tres capítulos enteros, descubrirás que los amigos íntimos realmente existen y que un amigo íntimo es alguien que:
- habla positivamente de ti cuando otros no lo hacen (ver 19:4)
- presta atención a tus problemas (ver 20:1, 2)
- hace cosas por ti, no importa lo inconveniente que sea (ver 20:4)
- te quiere aun cuando no mereces ser querido (ver 20:17)
- te protege de los malos (ver 20:19)
- sufre cuando tú sufres (ver 20:34)
- comprende tus sentimientos más profundos (ver 20:41)
- es leal (ver 20:42)
Sólo podemos ser ese tipo de amigos de unas pocas personas. Lleva tiempo y esfuerzo entablar y conservar amigos como esos. Cómo tener amigos no es un misterio. Ciertas reglas nos ayudan a tener amistades que duran la vida entera:
- Quiérete a ti mismo. Si no te quieres, será difícil querer a los demás.
- Acepta a los demás. Cada uno de nosotros es único. A veces somos antipáticos y ofensivos. Hay que hacer caso omiso de las faltas ajenas.
- Sé positivo. Serás como una ráfaga de aire fresco para las personas si evitas criticarlas. Aprende a elogiar lo positivo en ellas.
- Guarda los secretos. “Fulano me pidió que no se lo contara a nadie, pero sé que no le importará que te lo cuente a ti”. ¡Cállate! ¡Inmediatamente!
- Ten paciencia. Lleva tiempo cimentar una amistad profunda y permanente.
- Aprende a escuchar. Interésate por la otra persona. Obten más información. Y no sientas que tienes que interrumpir para contar tus propias historias.
¿Hay una o dos de estas reglas que te gustaría poner en práctica? Hazlo ahora, ¡porque Dios está listo para enseñarte el tipo de amistad que compartían David y Jonatán!
PARA DIALOGAR: ¿Qué tal te va en tu esfuerzo de ser un amigo del tipo que lo eran David y Jonatán?
PARA ORAR: Señor, ayúdanos a poner en práctica las reglas que nos guiarán a ser un mejores amigos.
PARA HACER: Escoge una de las reglas mencionadas y pónla en práctica hoy.