Lectura bíblica: Éxodo 20:1-17
Yo soy Jehovah tu Dios… No tendrás otros dioses delante de mí. Éxodo 20:2, 3
La hermana Camacho siempre tiene el ceño fruncido. Como es creyente, eso es un problema. Todos los que se encuentran con ella creen que conocer a Jesús lo pone a uno de mal humor.
Tema para comentar: ¿Haz conocido alguna vez a un creyente antipático? ¿Qué te hace sentir eso en cuanto a ser creyente?
Quizá hayas conocido a creyentes que parecen haber olvidado que Dios pone el amor en el centro de lo que significa seguirle a él. No basta con afirmar que amamos a Dios. Nuestro cometido es amar en dos direcciones: a Dios y a nuestro prójimo.
Jesús enseñó: “ ‘Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente’. Este es el grande y el primer mandamiento. Y el segundo es semejante a él: ‘Amarás a tu prójimo como a ti mismo’ ” (Mateo 22:37-39). Todo lo que tenemos que hacer se resume en esos dos mandatos. Amamos a Dios con todo nuestro ser, eso es “amor vertical”. Y amamos a los demás como nos amamos a nosotros mismos, eso es “amor horizontal”.
Los Diez Mandamientos en Éxodo 20 están organizados en las dos direcciones del amor. Los primeros cuatro mandamientos muestran cómo se expresa el amor vertical a Dios:
- No tendrás otros dioses delante de mí.
- No adorarás a los ídolos.
- No tomarás en vano el nombre de Jehovah nuestro Dios.
- Acuérdate del día de reposo para santificarlo.
Los próximos seis mandamientos presentan el amor horizontal hacia nuestro prójimo.
- Honra a tu padre y a tu madre.
- No cometerás homicidio.
- No cometerás adulterio.
- No robarás.
- No darás falso testimonio contra tu prójimo.
- No codiciarás.
Amar a Dios significa que lo adoramos y que reconocemos su grandeza total en todo lo que pensamos, decimos y hacemos. Y amar a los demás significa que los tratamos de una manera que coincide con su incalculable valor para Dios. Entonces, ¡cómo podemos estar de mal humor!
PARA DIALOGAR: Dios te llama a amar en dos direcciones: amarlo a él y amar a tu prójimo. ¿Qué tal te va con cada uno de esos?
PARA ORAR: Señor, aumenta nuestro amor por ti y por nuestro prójimo.
PARA HACER: ¿Eres un creyente que siempre parece estar de mal humor? ¿Qué te gustaría hacer para cambiar?