Lectura bíblica: 1 Juan 3:16
En esto hemos conocido el amor: en que él puso su vida por nosotros. También nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos. 1 Juan 3:16
Después de ser enviada de una familia a otras, por fin Julia tenía padres que la habían recibido en su hogar y que la querían. Tuvo berrinches, faltó a la escuela y los apartó de su mundo al negarse a hablar de sus intereses o su pasado. Pero los Martínez seguían brindándole su cariño y demostrando que la aceptaban; Julia lentamente comenzó a responder. Pero aun cuando por fin pudo sentir que alguien la quería, le costaba creer que Dios la amaba.
Si el mensaje del amor de Dios es potente en el Antiguo Testamento, cuanto más lo es en el Nuevo Testamento. A lo largo del Nuevo Testamento salta a la vista que Dios nos quiere muchísimo. Estas son algunas palabras de su amor sin las cuales no podemos vivir:
- La Biblia demuestra el tremendo amor de Dios en el versículo más famoso de la Biblia: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:16).
- Jesús dijo: “Nadie tiene mayor amor que éste, que uno ponga su vida por sus amigos” Juan 15:13).
- Pablo estaba pasmado de que Dios nos amara mientras todavía éramos sus enemigos: “Pero Dios demuestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:8).
- El sacrificio que Dios hizo de su Hijo para salvar a la raza humana pecadora es la expresión máxima de amor. Con razón Juan exclamó: “Mirad cuán grande amor nos ha dado el Padre para que seamos llamados hijos de Dios. ¡Y lo somos!” (1 Juan 3:1).
- Romanos 8:35, 38, 39 lista las cosas que no pueden separarnos del amor de Dios.
Y hay más. Vemos el amor de Dios el Padre por su Hijo (Mateo 3:17; Marcos 9:7) y el amor del Hijo por su Padre (Juan 14:31). Jesús nos dice que su amor por nosotros es como el amor del Padre por él (Juan 15:9). La Biblia nos ordena responder al amor de Dios amando a Dios (Mateo 22:37) y amando a otros (Juan 13:34, 35; Romanos 13:8; 1 Pedro 1:22; 1 Juan 4:7), incluyendo nuestros enemigos (Mateo 5:44). Y nuestra habilidad de amar viene directamente de Dios y de su naturaleza cariñosa (1 Juan 4:16, 17).
No puedes leer el Nuevo Testamento y no ver el mensaje de amor de Dios. El amor de Dios por nosotros está en todas partes.
PARA DIALOGAR: ¿Qué opinas de un Dios que derrama tanto amor sobre ti?
PARA ORAR: Ora hoy por tus amigos no creyentes que necesitan conocer personalmente a Dios y su amor.
PARA HACER: Memoriza uno de esos increíbles versículos bíblicos sobre el amor.