Lectura bíblica: Éxodo 34:5-7
[Yo soy] Jehovah, Dios compasivo y clemente, lento para la ira y grande en misericordia y verdad. Éxodo 34:6
Alberto miró su patineta con tristeza, destruida al realizar la hazaña más extraordinaria que jamás había realizado. La madera se había partido en dos y las ruedas habían salido lanzadas al espacio.
—No importa —suspiró Alberto—, esta noche consigo una nueva.
El amigo de Alberto se quedó boquiabierto.
—¿Esta noche? La patineta te la hicieron a medida. Estuviste ahorrando durante meses para comprar esas ruedas. ¿Cómo vas a poder conseguir una patineta nueva esta noche? —preguntó.
—El Hada de las Patinetas, por supuesto —dijo tranquilamente Alberto—. Cada vez que se te rompe una patineta, pones los pedazos debajo de tu cama y el Hada de las Patinetas te la cambia por una nueva mientras duermes.
Quizá ya eres demasiado mayorcito para creer en el Hada de las Patinetas. Pero cuando de Dios se trata, quizá tengas expectativas tan irrazonables como las de Alberto.
Tema para comentar: ¿De qué modo espectacular te gustaría que Dios te demostrara claramente su amor por ti? ¿Dándote una calificación perfecta en un examen? ¿No dejando que jamás tengas que caminar en la lluvia? ¿Haciéndote ganadora de un concurso de belleza?
Esas serían maneras buenísimas de asegurarte del amor de Dios. Pero la realidad es que no necesitamos nada espectacular. Podemos ver su amor en los alimentos y otras cosas buenas que nos proporciona. Podemos detectar su amor reflejado en las personas que ha puesto alrededor de nosotros. Pero por si todavía no estás seguro de su cariño, él lo ha expresado claramente en su Palabra.
En la Biblia, cientos de versículos nos hablan del amor de Dios por nosotros. Escucha estas palabras acerca de cómo tu Dios cariñoso se dio a conocer en el Antiguo Testamento: “El gran amor del Señor envuelve a los que en él confían” (Salmo 32:10 NVI). “Tu amor, Señor, llega hasta los cielos; tu fidelidad alcanza las nubes” (Salmo 36:5 NVI). “El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota” (Lamentaciones 3:22 NVI). “Tu gran amor lo tengo presente, y siempre ando en tu verdad” (Salmo 26:3 NVI).
Y según Jesús, el amor es el mensaje principal de la Biblia. Dijo: “‘Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente’. Este es el grande y el primer mandamiento. Y el segundo es semejante a él: ‘Amarás a tu prójimo como a ti mismo’” (Mateo 22:37-39).
Dios es todo amor. La Biblia lo expresa claramente. Y nosotros nos encontramos en el centro de su corazón lleno de amor.
PARA DIALOGAR: ¿Cuál de los mensajes mencionados de la Palabra de Dios te hacen sentir más seguro de su amor por ti?
PARA ORAR: Da gracias a Dios porque proclama su amor por ti a través de la Biblia.
PARA HACER: Memoriza cualquiera de los versículos alentadores en este devocional acerca del gran amor de Dios por ti.