Lectura bíblica: Juan 14:19-21
En aquel día vosotros conoceréis que yo soy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros. Juan 14:20
Irene se despierta de muy buen humor y se viste rápidamente. Ella y la familia González van a pasar el día en un parque de diversiones que ha llegado a la ciudad. Entrando muy contenta en la cocina dice con entusiasmo:
—Buenos días, mami. Es un día hermoso, ¿no te parece?
La mamá la mira y dice:
—Sí, querida. Espero que te diviertas muchísimo en el parque de diversiones. Ya estaré trabajando todo el día, pero estaré de vuelta en casa para cuando regreses.
Irene le da un abrazo a la mamá, feliz de que siempre puede contar con que le diga algo alentador.
Al salir de casa, Irene se encuentra con un agente de policía que justo pasa por el frente de su casa.
—Buenos días, agente —dice—, hoy voy al parque de diversiones.
El policía le sonríe y hace una señal de aprobación. Le dice que ojalá pudiera ir él también pero que espera que después ella le cuente cuánto se divirtió. Irene aprecia su interés y lo saluda con la mano mientras cada uno se va por su propio rumbo.
Cuando Irene llama a la puerta de la familia González, le abre Carlos. Le dice que sus padres estarán listos en un momentito. Parece entusiasmado:
—Vayamos a la Casa de los Monstruos en cuanto lleguemos —dice.
Irene empieza a temblar, pero dice que sí. Sabe que los monstruos no son de verdad, así que no tiene que tenerles miedo. Sabe que Jesús es su Señor y Salvador. Él vive dentro de ella y es más fuerte que cualquier monstruo falso. Nada puede hacerle daño.
Jesús les dijo a sus discípulos que estaría en ellos, no sólo con ellos, no sólo junto a ellos, sino dentro de ellos (ver Juan 14:20). Pablo lo confirmó y escribió: “Cristo en vosotros” (Colosenses 1:27).
—Epa, un momento —quizá digas—. Ayer decía usted que era el Espíritu Santo el que vive en mí… Ahora dice que es Cristo. Entonces, ¿quién realmente vive en mí: el Espíritu Santo o Cristo?
Si eres creyente, los dos: Jesucristo y el Espíritu Santo viven dentro de ti. La Biblia explica que el Espíritu de Dios es el Espíritu de Cristo (ver Romanos 8:9). Y el mismo Espíritu Santo que vivía en Jesús vive en ti para enseñarte, confortarte y darte fuerza.
PARA DIALOGAR: Piensa en tus familiares y amigos más cercanos. ¿Qué opinas del hecho de que Dios está aún más cerca de ti que ellos, viviendo dentro de ti sin dejarte nunca?
PARA ORAR: Señor, gracias porque siempre estás cerca y disponible para nosotros.
PARA HACER: Alaba al Dios que te ama tanto que quiere vivir dentro de ti.